martes, 29 de mayo de 2018

Los procesos sociales revolucionarios de los siglos XVII, XVIII y principios del siglo XIX en América y Europa


Siglos XVII

El siglo XVII en Europa está fuertemente marcado por el pensamiento renacentista que tuvo su auge durante el siglo anterior, y por los avances en la ciencia que provocaron una verdadera revolución científica. Entre los científicos y filósofos más destacados de este período se encuentran Galileo Galilei, Newton y Descartes; son ellos quienes sientan las bases para la instauración del racionalismo, el cientificismo y el mecanicismo en Occidente. Por otra parte, este siglo es heredero de la revolución religiosa provocada por la reforma de Lutero, es decir por el surgimiento del Protestantismo
Se sitúa en esta época el traspaso de la edad media a la moderna; la escolástica deja de ocupar un lugar central en lo que se refiere a la producción del pensamiento de la época y dar lugar a las ideas del renacimiento, de la ilustración, del racionalismo, del empirismo y posteriormente del criticismo. Rápidamente el mundo dejó de regirse por las leyes de la religión y del dogma cristiano que fue hegemónico durante muchos siglos en Occidente. El proceso de cambio iniciado en Europa durante el siglo XII conocido como Renacimiento del siglo XII comenzaba a dar sus frutos.


Siglo XVIII

En Europa las Nuevas Ideas de la Ilustración plantean una visión diferente de la naturaleza, la cual funcionaría según leyes regulares y estaría en equilibrio. Se extiende el carácter de racional a todo, y en la política esto provoca el cuestionamiento a las monarquías. Las principales características de la ilustración son el cuestionamiento a la autoridad religiosa, la iglesia y los dogmas; el desarrollo del espíritu crítico que pone en duda todos los conocimientos válidos y el orden social establecido; la confianza en la ciencia y el progreso elevado a un optimismo extremo.
Los principales exponentes del siglo XVIII
Locke: Propone un liberalismo político y que el gobierno esté en manos de todos los miembros del pueblo, quienes deben establecer un contrato social para delegar una parte de su poder a un soberano. “El estado se basa en el consentimiento voluntario de los hombres que dan a los gobernantes el poder necesario para proteger sus vidas, su libertad, sus intereses y sus propiedades”.
Voltaire: Las leyes deben ser armónicas. El hombre debe legislar usando la razón. No creía en la igualdad social, consideraba que la educación debía ser proporcionada a las clases altas y no a las bajas, sí expresa los deseos de la alta burguesía de su época. También sostiene la importancia de la tolerancia y de libertad de expresión.
Rousseau: Sostiene que el hombre necesita vivir en sociedad y por ellos debe relegar su libertad individual en pos su propia supervivencia, debido a ello es que resulta necesario establecer un contrato social siguiendo el modelo de la democracia directa de tipo griega, donde el soberano encarna la voluntad general y se dedica a buscar el bien común.
Por otra parte estaban los fisiócratas, quienes desarrollaron ideas en torno a cuestiones principalmente económicas; entre ellos se encuentra Quesnay, quien sostiene que la fuente de riqueza es la tierra (autoridad de la tierra). Esta idea luego es tomada por España, que anteriormente no se dedicaba al cultivo sino a la ganadería.
Finalmente, Adan Smith, quien también compartía las ideas de los fisiócratas se ocupó de realizar la formulación económica del liberalismo, sosteniendo que la riqueza no la da el comercio sino el trabajo.
La Revolución Gloriosa es la primera aplicación de las nuevas ideas en el ámbito político, permite la instauración de una monarquía parlamentaria.
La Revolución Francesa es un acontecimiento importantísimo en la historia de Europa, de América y de todo Occidente; a partir de allí los nobles perdieron sus títulos y se declaran los derechos del hombre y del ciudadano. La Toma de la Bastilla da fin a la Edad Moderna y da inicio a la Contemporánea. Las voces de los burgueses se alzaron en contra del Antiguo Régimen y a partir de ese momento el pueblo tomó conciencia de que podía decidir de qué modo serían gobernados.
En el viejo continente Carlos III implementó las Reformas Borbónicas, por medio de las cuales estableció una nueva forma de administrar sus riquezas y sus tierras, por medio de la fragmentación de los virreinatos, y la creación de intendencias para controlar mejor los recursos y para evitar la fuga de riquezas provocada por el contrabando; estas medidas conformaban un sistema centralizado que facilitaba el control. El despotismo ilustrado incorpora las nuevas ideas modernas en torno a la política y a la economía, a las que une el autoritarismo y el interés por las tierras. España reorganizó sus relaciones administrativas, militares y comerciales.
En América, a consecuencia de las reformas borbónicas se crea el Virreinato del río de la Plata, se diseña un nuevo sistema de puertos y se instaura el puerto de Buenos Aires.
La pérdida del Alto Perú implica que el virreinato pierda su mayor fuente de riqueza, entonces hay que buscar un nuevo recurso económico.


Principios del siglo XIX

En Europa, el imperio napoleónico extendió las ideas de la revolución francesa por una gran parte del continente. La burguesía fue adquiriendo cada vez mayor preponderancia como actor social.
En España la invasión de Napoleón en 1808 provoca una resistencia que tiene consecuencias en el virreinato del Rio de la Plata.
En América se producen las invasiones inglesas en 1806 y 1807 como consecuencia del enfrentamiento de España y Francia con el Reino Unido.
El impacto de las invasiones inglesas deviene en la militarización del virreinato a la vez que trae consecuencias económicas y políticas. Las invasiones se producen por cuestiones más políticas que económicas, pero se suma el tema de que aquí el comercio era muy importante dentro de la actividad privada.
Los comerciantes pensaron que sería bueno separarse de las casas matrices y se produce levantamiento del 1° de enero, Juan Martín de Álzaga quiere instaurar una república (idea medieval) donde los comerciantes tengan el poder para así poder promover el mercantilismo, pero esta idea no es apoyada por los otros grupos sociales y terminan asesinando a Álzaga.
En 1810 encontramos en nuestro territorio un nuevo inicio político, la pregunta es cómo nos vamos a organizar políticamente, hay que decidir quiénes van a dirigir el estado, podría ser la élite económica o la élite ilustrada. Hay tres grupos de ideas enfrentadas, en primer lugar se toma conciencia de que la Revolución Francesa puso en jaque a la monarquía, los medievalistas consideran que si el rey no tiene derecho divino, entonces el poder debe volver al pueblo (tomando la idea de voto por grupos, no por persona), y por otra parte están los revolucionarios, que quieren instaurar la democracia.
A la vez, tenemos un nuevo inicio económico, surge un modelo económico ligado a la ganadería (venta de cuero, cebo y astas); pero recién en 1880 se consolidan, una economía sustentable, una clase política dominante y un territorio nacional. Es recién en esta década que se terminan de incorporar territorios al país (la Patagonia y el Chaco)

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